
China exhibe su poderío militar con un gran desfile en Pekín en presencia de Putin y Kim Jong Un

China exhibió el miércoles su poderío militar con un gran desfile en Pekín presidido por Xi Jinping, acompañado por primera vez del presidente ruso, Vladimir Putin, y del líder norcoreano, Kim Jong Un.
Al inicio del desfile, en la céntrica Plaza de Tiananmen, el presidente chino advirtió que el mundo aún se enfrenta a "la elección entre la paz o la guerra" y afirmó que China es "imparable", aunque no hizo referencias explícitas a Estados Unidos o a cuestiones controvertidas, como Taiwán o los aranceles aduaneros.
Una salva de 80 cañonazos sirvieron de pistoletazo de salida para el espectáculo, que conmemora el 80º del aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial. En las tribunas, miles de personas corearon canciones patrióticas.
Xi estrechó la mano de sus invitados, los líderes de Rusia y Corea del Norte, y los tres caminaron juntos por una alfombra roja hacia la plaza.
Durante los 90 minutos que duró el desfile China mostró toda la gama de su armamento, incluyendo drones submarinos, tanques, armas láser o aeronaves.
Según la agencia oficial china Xinhua, se exhibieron por primera vez los misiles nucleares intercontinentales DongFeng-5C con "alcance global" y los proyectiles de crucero ChangJian-20A, YingJi-18C y ChangJian-1000.
También se vieron drones de reconocimiento y ataque así como helicópteros no tripulados de diseño futurista, además de otras aeronaves, según la prensa estatal.
La revista militar transcurrió bajo la mirada de una decena de líderes mundiales, incluido el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, indicó Xinhua.
El evento, cuidadosamente coreografiado, provocó la respuesta del presidente Donald Trump, quien acusó a los líderes chino, ruso y norcoreano de conspirar contra Estados Unidos.
"Envíen mis más cordiales saludos a Vladimir Putin y Kim Jong Un, mientras conspiran contra Estados Unidos de América", escribió en su plataforma Truth Social.
El Kremlin respondió que espera que Trump estuviera siendo "irónico".
- Músculo militar -
Xi inspeccionó las tropas y el armamento desde un auto descapotable que avanzaba por la amplia avenida Chang'an.
Luego se reunió con sus invitados en una zona de asientos situada sobre el emblemático retrato de Mao Zedong en Tiananmen, la puerta de entrada a la histórica Ciudad Prohibida.
Además de la enorme colección de vehículos militares y de armas pesadas, las imágenes de los medios mostraron a miles de militares con uniformes impecables marchando en apretadas filas.
Los residentes de Pekín salieron a las calles para ver la revista aérea en la que participaron decenas de aviones de combate y helicópteros, algunos de los cuales formaron el número 80.
Millones de chinos murieron durante la guerra con el Imperio japonés en las décadas de 1930 y 1940, que se convirtió en parte de la Segunda Guerra Mundial tras el ataque de Tokio a Pearl Harbor, en 1941.
La parada militar es el punto álgido de una intensa semana diplomática, en la que Xi recibió a líderes de diez países para la cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS) en la ciudad de Tianjin. Su objetivo es promover una gobernanza mundial alternativa.
La seguridad en torno a Pekín fue reforzada los últimos días y semanas, con barreras, cierres de carreteras y personal militar en puentes y esquinas.
China asegura que el desfile es una muestra de unidad con otros países y por primera vez Kim Jong Un apareció junto a Xi y Putin en un mismo evento.
En una reunión bilateral este miércoles tras la parada militar, el presidente ruso dio las gracias a Kim por su apoyo en la "lucha contra el neonazismo contemporáneo" y por el envío de tropas a luchar contra Ucrania.
"Por iniciativa suya, como se sabe, sus fuerzas especiales participaron en la liberación de la región de Kursk (...). Me gustaría destacar que sus soldados combatieron valerosa y heroicamente", le dijo Putin.
El líder norcoreano llegó a Pekín acompañado de su hija y posible heredera Kim Ju Ae, quien hizo allí su debut internacional.
Y.Robles--HdM