Heraldo de Madrid - Cómo el Barça "femení" entró en otra dimensión

. Una profesionalización tardía

Nacido en 1970 con el nombre de Selección Ciudad de Barcelona para un partido amistoso, el equipo adoptó un año más tarde el nombre de Peña Femenina Barcelonista y, en los años 1980, se convirtió en el Club Femení Barcelona. No fue hasta 2022 cuando se convirtió oficialmente en la sección femenina del FC Barcelona.

En un reportaje difundido en El País el pasado año, Natalia Astrain, entrenadora de 2002 a 2006, y Sheila Sanchón, exjugadora, recuerdan: "Entrenábamos en un campo que era un aparcamiento el fin de semana", "ganábamos unos 700 euros (758 dólares ) al mes" y "hacíamos los desplazamientos en nuestros coches particulares".

. El estadio Cruyff

El equipo se hace profesional en 2015, y en 2017, el Barça inicia la construcción del estadio Johan Cruyff (6.000 localidades), destinado al filial masculino y al equipo femenino. Una inversión de 12 millones de euros (13 millones de dólares) que será rentable ya desde su finalización en el verano de 2019, y que ayudará al Femení a atraer a jugadoras de calibre internacional como Lieke Martens, mejor jugadora del mundo en 2017 según la UEFA y la FIFA, fichada ese año.

. El patrocinador Stanley

Paralelamente, en 2018, la firma de bricolaje Stanley inyecta 3,5 millones de euros (3,8 millones de dólares) por temporada hasta 2022 para ser el patrocinador principal del equipo femenino, que luce un espónsor diferente del conjunto masculino. El año anterior, los dirigentes habían decidido no incluir al equipo femenino en el acuerdo con Rakuten precisamente para intentar seducir a un patrocinador diferente para las féminas.

En 2018-2019, el equipo femenino es la única sección del FC Barcelona económicamente rentable. Este verano, Stanley cederá su plaza a Spotify, que ha sellado un gran acuerdo de patrocinio con el club azulgrana.

. La final de Champions perdida en 2019

El 18 de mayo de 2019 es la fecha que hará entrar al Barça en otro nivel. Varias jugadoras internacionales llegaron al vestuario, el nivel de juego dio un salto y bajo la dirección de Lluis Cortes, el Barça alcanzó la final de la Liga de Campeones. Pero las catalanas fueron aplastadas por el Lyon. En el camino de vuelta, en el aeropuerto de Budapest (sede la final), una conversación entre el entrenador y las capitanas cambiará todo.

"Nos dominaron tanto que dijimos a Lluis que queríamos progresar en todos los ámbitos para volver y ganar esta final. Y fue lo que hicimos. Entrenamos más duro y nos preparamos mentalmente para alcanzar este objetivo", dijo la joven Vicky Losada.

. La apertura de la Masía

Para cambiar de dimensión, el Barça tuvo que atraer a algunas jugadoras internacionales a imagen de Lieke Martens, las noruegas Caroline Graham Hansen e Ingrid Engen, que continúan en el club, o las francesas Kheira Hamraoui y Elise Bussaglia (que no siguen). Pero se apoyó también mucho en su formación con estrellas como Gemma Font, Aitana Bonmatí o la superestrella Alexia Putellas.

y suma y sigue: el verano pasado, nueve pioneras entraron a tiempo completo en la Masía, el centro de formación del Barça, hasta ahora cerrado a las chicas.

. El fruto de los esfuerzos

Todos estos esfuerzos dieron sus frutos. En 2020-2021, el Barça logró un increíble triplete Copa de la Reina-Liga-Champions, levantando la primera Liga de Campeones de su historia.

Los catalanas dominaron España y Europa. Alexia Putellas conquistó el Balón de Oro en 2021 y el título de mejor jugadora del año de la UEFA, una ceremonia que llevó a sus compañeras de equipo Jennifer Hermoso y Lieke Martens a ocupar los otros dos cajones del podio.

Y contra el Wolfsburgo en semifinales, las catalanas tendrán la ocasión de alcanzar una segunda final de Champions consecutiva para confirmar su supremacía continental.

B.Lara--HdM